Hace años que los petrodólares irrumpieron en el mundo del fútbol mediante adinerados jeques que empezaron a comprar equipos de diferentes ligas. Sin duda alguna el máximo exponente de estos equipos es el Manchester City cuyo dueño, el jeque Al-Mansour, ha invertido 643 millones de euros en apenas 4 temporadas. Esta cantidad ha sido invertida en fichajes tan mediáticos como el de David Silva, el Kün Aguero, Dzeko, Samir Nasri o el controvertido Balotelli.
Desde que el jeque aterrizó en el conjunto sky blue los éxitos han llegado y han conseguido conquistar una FA Cup, una Community Shield, la clasificación para la Champions League y una Premier League, la primera en 44 años.
El despilfarro económico ha sido el plan seguido por el City para convertirse rápidamente en un equipo de primer nivel pero parece ser que a partir de esta temporada esto cambiará. El ex-jugador y actual directivo de los citizens, Patrick Vieira, ha declarado recientemente que "los tiempos de grandes gastos del Machester City han terminado".
Segun Vieira "el City ha gastado mucho porque queríamos estar entre los grandes y ahora que tenemos una base solida, apostaremos por los jóvenes".
Con este giro en la dirección deportiva del City se pretende dar la oportunidad a los jóvenes valores del club para así comenzar un nuevo ciclo lleno de éxitos deportivos mezclando a jugadores consolidados y jugadores echos dentro de los muros del Manchester City.
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